El titular del juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 3 de Palma ha dictado un auto con el que se declara incompetente en la demanda que la propiedad de Muleta II interpuso contra el ayuntamiento de Sóller para forzarlo a recalificar los terrenos de la mencionada urbanización.
En su escrito, el juez señala que el recurso debe ser remitido al Tribunal Superior de Justicia de Baleares (TSJB), el mismo que en 2013 dictó la resolución con la que los terrenos de Muleta pasaron a tener la consideración de suelo urbano.
Birdie Son Vida, empresa propietaria de la urbanización y vinculada al empresario Matthias Kühn, interpuso la demanda por la vía contenciosa contra el ayuntamiento de Sóller, para así forzarlo a modificar el planeamiento urbanístico para recalificar los terrenos que, de acuerdo con la planimetría, actualmente están considerados como terreno rústico.
Lo que recoge el Plan General se contradice con la sentencia dictada por el Tribunal Superior, que sí reconoce que los terrenos son urbanos.
En la demanda ahora desestimada, Matthias Kühn reclamaba la recalificación ya que, en caso de no hacerse, podría dar pie a una importante indemnización que el empresario estima que podría rondar los cien millones de euros. Con la resolución ahora dictada, el procedimiento deberá comenzar de nuevo.
Subasta
Al conflicto que mantiene con el ayuntamiento se le suma otro proceso judicial que Kühn tiene con la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb), entidad pública que recientemente promovió la ejecución de una hipoteca contra Muleta II para resarcir 3,5 millones de euros.
La urbanización entró en proceso de subasta por un precio de salida de siete millones, pero los propietarios consiguieron in extremis paralizarla hasta nueva fecha.
