La conocida Sala Rigal tendrá finalmente un coste de 2,3 millones de euros (en la edición de ayer se publicó por error la cifra de 16, 2 millones a asumir por las arcas del ayuntamiento de Sant Llorenç). La comisión de Cultura sugirió cambiar el nombre al ambicioso nuevo recinto sociocultural polivalente. Así, el consistorio ha optado por el de Espai 36, al hallarse en el número 36 de la calle Major. Se prevé activarlo después de Sant Antoni, es decir, a finales de enero.