El buen tiempo que se registró ayer en la isla fue el mejor aliado de la Fira de Tardor de Muro, que según datos aportados por el Ayuntamiento fue visitada por unas 4.000 personas que disfrutaron de un programa repleto de actividades para todos los gustos y de decenas de paradas comerciales en las que podían adquirirse todo tipo de productos gastronómicos o artesanales. Además, la feria presentaba el atractivo añadido del noveno concurso de calabazas, una pequeña feria en sí misma que año tras año adquiere más protagonismo.

La jornada de ayer culminaba un fin de semana lleno de actividades culturales entre las que han destacado la X Mostra de Vins i Degustació de Formatges o la 'processó de llanternes', además del 'correfoc infantil' o los actos conmemorativos del 50 aniversario del Museu Etnològic de Muro, que el sábado recibió la visita del president del Consell, Miquel Ensenyat, y otras autoridades y familiares de Gabriel Alomar, propietario original del edificio que alberga el museo. Los participantes aprovecharon para realizar una visita guiada por las instalaciones.

La quinta edición de la Mostra de Cuina Murera también obtuvo mucho éxito durante la jornada del sábado.

Las aproximadamente 4.000 personas que visitaron la feria en la jornada dominical recorrieron las calles más céntricas de la localidad 'murera', donde se habían instalado un centenar de paradas comerciales de todo tipo, además de diferentes puntos informativos sobre entidades y asociaciones locales.

Cabe destacar que a mediodía la feria se paró de forma provisional para hacer un minuto de silencio muy emotivo para condenar los atentados de París.

La feria contó con diferentes talleres como el de 'tir de fona'. Este año el programa 'Tu també ets cultura' estaba dedicado al patrimonio arqueológico existente en el municipio.