El ayuntamiento de Llubí convocó el pasado viernes la primera reunión participativa para que los vecinos del municipio opinasen sobre las diferentes opciones municipales para la puesta en marcha de la futura escoleta municipal. El resultado de la reunión informativa fue el de una "preferencia clara" por parte de los vecinos participantes sobre la adquisición de un solar para ubicar el futuro centro educativo, con un coste aproximado de 700.000 euros.

Esta opción se impuso sobre las otras dos alternativas presentadas por el Ayuntamiento: la compra del edificio de ca ses Monges y la posterior reforma del edificio (donde se ubica la actual escoleta) o la ejecución del proyecto en el local de sa Farinera, un inmueble cedido por el Govern que "necesitaría una importante reforma integral", según el equipo de gobierno integrado por Més per Llubí, el Pi y Feina per Llubí.

Durante la reunión, la alcaldesa Magdalena Perelló y los técnicos municipales y del Consell expusieron a los vecinos las tres opciones y la viabilidad de cada una de ellas. El Ayuntamiento garantiza que la opinión vecinal se tendrá en cuenta en la decisión final adoptada por el pleno.