El Ayuntamiento de sa Pobla presentó ayer un informe económico en el que se asegura que hasta el mes de mayo de 2023 "nos falta un millón de euros". En 2016 deberá abonar un préstamo "a razón de un millón de euros anuales hasta 2023".

El equipo de gobierno afirma que "ha habido una relajación total en el cobro de los impuestos: unos 60.000 euros del mercado dominical, alrededor de 120.000 euros en el cobro de recibos de agua" y destaca también "que en doce años no ha habido ninguna infracción urbanística". Recordemos que en 2012 el consistorio firmó un préstamo por valor de seis millones de euros. Según el PP, "ésta era la cantidad de facturas de proveedores que se encontraron". Según Margalida Serra, portavoz del PP, con este préstamo "se consiguió pagar a los proveedores a treinta días, cosa que ahora no pasa". Una gestión dudosa según el nuevo equipo de gobierno. Un préstamo en el que "los dos primeros años sólo se pagaban intereses. En Agosto se pagó la primera cuota y no es hasta finales de este año que el Estado nos regala una carencia de un año, pura coincidencia", según informó Joan Pérez, concejal de Hacienda.

Una de las posibles soluciones es el aumento de impuestos, aunque el alcalde, Biel Ferragut, informó: "Buscaremos fórmulas para que no sea así". Pérez aseguró de que se trata de "un reto" y que las soluciones pasan por "controlar los gastos, hacer unos presupuestos más realistas y aumentar los ingresos". Pérez también informó de que en el presupuesto "se computó durante dos años consecutivos la venta de un inmueble por 50 millones de euros, el cual no se vende pero tenemos los gastos". También destacó el servicio de la escoleta municipal, que "presenta un déficit de 128.000 euros". "Nosotros encontramos un déficit de 300.000 euros en la escoleta y se tuvieron que subir los precios, una medida nada popular pero necesaria", denunció la portavoz del PP.

Durante estas últimas semanas el consistorio ha ido informando de que se encuentra en una situación "preocupante". Ferragut aseguró que "cuando el PP propuso la bajada de impuestos en 2014 votamos en contra porque veíamos que era una medida electoralista y que no bastarían los ingresos", refiriéndose a la bajada de impuestos sobre la contribución, la tasa de basura o la tasa del mercado dominical que se realizó con el anterior gobierno.