La Comissió de Memòria Històrica de Porreres acordó hace tres semanas pedir que se eleve al pleno de este próximo lunes, una moción por la cual se solicita el permiso municipal para poder iniciar los trámites administrativos que, finalmente, hagan posible la apertura de la fosa común del cementerio, en búsqueda de restos de los asesinados durante la dictadura franquista.

Una vez obtenido la luz verde municipal, la comisión, formada por un representante de cada partido político, por un miembro de Memòria Històrica de Mallorca y por un representante de las familias afectadas, podrá comenzar a solicitar permisos para proceder a realizar las catas oportunas y el primer contacto con arqueólogos que determinen cuándo y cómo podría abrirse la fosa.

La moción, en nombre del Ayuntamiento, recuerda "la importancia que tiene nuestro pueblo en la localización de las fosas correspondientes a la represión, y documentar el número de muertos por causa violenta, con el deseo de cerrar aquella etapa vergonzosa, cruda y despiadada"; al tiempo que recuerda que todo ello no sería posible "sin la prospección, la excavación y el análisis de los restos óseos (y objetos asociados) de las personas desaparecidas que se puedan localizar allí".