Vecinos de la Colònia de Sant Pere alertaron el pasado martes a la conselleria de Medio Ambiente del Govern sobre unas obras que llevaba a cabo la empresa pública Tragsa para retirar los escombros de los escars que se derribaron a consecuencia de los temporales. Según informó ayer la propia Conselleria, "los agentes de Medio Ambiente se dirigieron al lugar de los hechos y levantaron acta de las actuaciones de emergencia que realizaba la demarcación de Costas". Resulta que la zona afectada se halla en un espacio protegido bajo la figura de Xarxa Natura 2000 y, por lo tanto, los proyectos y las obras que se desarrollen han de ser supervisados por la autoridad ambiental. En esta línea, la semana que viene "se reunirán el presidente de la Comisión Balear de Medio Ambiente y la directora general de Espais Naturals i Biodiversitat con el jefe de la demarcación de Costas para reclamar, entre otras cosas, que a partir de ahora a la hora de llevar a cabo obras en el litoral isleño y más aún en zonas preservadas, se dé cuenta de las actuaciones a la conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca".

Según el Ejecutivo autonómico, las polémicas actuaciones en Ca los Camps, sin previo aviso al Ayuntamiento ni a la Conselleria, "están suponiendo una modificación de los perfiles geomorfológicos y también se perjudica a tamarells, especie de especial protección del catálogo balear de especies protegidas".

La Conselleria solicita a Costas "mayor coordinación a la hora de ejecutar actuaciones en zonas de alto valor ecológico y paisajístico". Ante estos hechos, desde el primer momento la dirección general de Espais Naturals i Biodiversitat se coordinó con el ayuntamiento de Artà y el GOB "para pedir explicaciones". Balears es la comunidad "donde la proporción de línea de costa respecto a la superficie terrestre es más elevada".