La localidad de Alaró amaneció ayer martes repleta de folletos que el grupo de la oposición, Junts per Alaró, se encargó de repartir casa por casa. En ellos se hace referencia a la "primera gran decisión" que ha tomado la alcaldesa socialista, Aina Munar. Nada más y nada menos que el aumento de su sueldo, que asciende a 37.526 euros anuales, tal y como ya publicó este diario en su día.
El folleto distribuido por el grupo político del exalcalde Joan Simonet da a entender que Munar percibe un salario que cuadruplica al de sus antecesores en el cargo e incluso incluye un gráfico para comparar los emolumentos de los últimos alcaldes de la localidad del Raiguer. Según el documento, el elevado salario de la actual alcaldesa socialista contrasta con las dietas que percibían los anteriores regidores de la corporación, que ascendían a 800 euros en los casos de Joan Simonet (PP), Miquel Deyà (PSOE), Josep Gomila (PSM) y a 600 euros en el del anterior alcalde socialista Paco Rosselló.
En el folleto se critica que en un período de crisis económica como el que estamos atravesando la alcaldesa decida ponerse un sueldo tan elevado como el que tiene, aunque cabe remarcar que está dentro de los límites de la ley. En la publicación también vuelven a hacer hincapié en la gran diferencia que hay entre el sueldo de la alcaldesa y el de sus regidores, quienes cobran 400 euros al mes. Para la oposición esta diferencia económica no es justificable, ya que reconocen la labor de los regidores. Además, Junts per Alaró remarca que se ha decidido utilizar el superávit de las basuras para ayudar en la financiación de su sueldo.
Asimismo, el folleto incluye una crítica a Guillem Balboa (Més), socio de gobierno de Aina Munar y futuro alcalde del municipio, a quien acusan de realizar una "fuerte defensa" del sueldo que percibe la regidora e insinúan que el motivo es que dentro de dos años será él quien perciba esta cantidad.
Polémica
La publicación de estos folletos no ha dejado indiferente a nadie, y es que no es frecuente que fuera de la campaña electoral se reparta este tipo de información. Las primeras reacciones se hacían en las redes sociales el mismo lunes por la noche, cuando Junts per Alaro, poco antes de medianoche, repartió los folletos de la discordia. Algunos miembros del partido socialista ya han mostrado su indignación y malestar ante este tipo de oposición.
En este sentido, el líder de Junts per Alaró, Joan Simonet, defendió ayer esta manera de hacer oposición y recordó que cuando el PP, su anterior grupo municipal, estaba en la oposición ya había realizado campañas similares.
Por su parte, la alcaldesa Aina Munar (PSOE), explicó ayer que "hasta la fecha los alcaldes de Alaró no tenían dedicación exclusiva y cobraban dietas" porque, en el caso de Joan Simonet, también percibía un salario público del Govern por su cargo en el Fogaiba. Munar añadió que la interventora municipal alertó de que el sistema de indemnizaciones municipales "no era legal y debía regularizarse". La alcaldesa afirmó que si el Govern incluye al municipio en el sistema de indemnizaciones a los alcaldes, el Ayuntamiento solo deberá hacer frente al coste de la seguridad social.
La regidora negó que el aumento de su salario haya impedido bajar la tasa de residuos.
