La nueva iniciativa que ha nacido en estas fiestas populares de Maria de la Salut ha movilizado a casi todos los vecinos del pueblo. Se ha tratado de decorar las calles con motivos diferentes y a gusto de los que las habitan.

Se han realizado algunas obras dignas de artistas de vanguardia. Lo más destacado es, sin duda, la colaboración y el trabajo que han realizado todos los vecinos para que su calle resultara atractiva a todos los demás.

En algunos de los viales se ha tenido en cuenta el nombre de su placa, como en el carrer del Carme, cuya virgen es la patrona de los pescadores, y los vecinos han adornado con paperí azul imitando al mar con algunas figuras de peces de por medio.

En la calle Lluna puede verse una gran luna y cientos de estrellas.

Las mujeres han llevado el peso de las labores de adorno pero los hombres y niños no han sido menos. El hecho de que trabajaran juntos residentes de todas las edades ha originado alguna que otra curiosidad. "No sabía que este joven vivía con su mujer y su hija en esta calle, no los había visto nunca. Ha sido muy simpático conmigo", decía una mujer de edad avanzada al tiempo que confeccionaba uno de los adornos.

La calle de Ses Venes, que es muy larga y en un tramo hay muy pocas viviendas, ha contado con la estimable colaboración de los vecinos que tienen la fachada en Àngel Madrigal pero las entradas en garajes y patios están situadas en Ses Venes. También han participado en la tarea la mayoría de vecinos extranjeros, "es un trabajo de todos para que nuestro pueblo sea el más bonito", afirmaba uno de ellos subido a una escalera para enganchar una figura. "Si nuestra calle no es la más bonita me da igual porque lo importante es lo bien que nos lo hemos pasado todos juntos las viejos y los más jóvenes", explicaba Maria Antònia.

Durante los días que han durado las faenas no han faltado las comidas y cenas en cada una de las vías públicas. Ha sido una actividad que ha tenido mucha aceptación en el municipio.