El Ayuntamiento de Inca ha invertido 26.000 euros en alquilar cinco módulos prefabricados para el campo del Sallista. Se trata de cuatro unidades que se destinarán a vestuario para los jugadores y otra más como aseos.

Virgilio Moreno, alcalde de la ciudad, apunta que "se trata de una inversión heredada del anterior ejecutivo con la que se pretende paliar las carencias con que se encuentran ahora mismo los equipos de fútbol base de la ciudad". Cabe explicar que el Camp Nou (estadio del Constància) está cerrado al haber finalizado el período de cesión de 30 años al histórico club. El campo del Sallista forma parte del mismo complejo.

Al estar cerrado y ser una propiedad privada, el Ayuntamiento no puede hacer legalmente ninguna inversión sin un convenio de colaboración o una cesión. Como quiera que pertenece a más de 300 pequeños propietarios es necesario el acuerdo de todos ellos para proceder.

Reunión

Moreno asegura que se está trabajando arduamente en intentar localizarlos para "convocarles a una reunión que se llevará a cabo el mes próximo".

Teniendo cerrado el Camp Nou, incluso el propio equipo senior del Constància entrena y disputa sus partidos en el campo del Sallista.

El coste de los módulos que se instalarán es de 108.000 euros. Moreno explica que "se estudió si valía la pena adquirirlos pero ante la posibilidad de resolver en breve la cesión del complejo al Constància o al Ayuntamiento se ha optado por alquilarlos por un año". Es preciso aclarar que existen unos 400 niños y niñas practicantes de fútbol base en la ciudad por lo que la actuación municipal se hacía muy necesaria.

Al mismo tiempo, la asociación de padres de jugadores ha iniciado por su cuenta y financiándolo de su propio bolsillo, la construcción de una nueva grada en el terreno de juego.