Sa Pobla celebró el pasado jueves un primer pleno ordinario no exento de polémica cuando el equipo de gobierno propuso delegar la aprobación de modificaciones de precios públicos a la junta de gobierno. Además de los desacuerdos en los sueldos políticos, el tema principal fue la decisión de derivar estas decisiones a la junta, en primer orden, y no al pleno. La junta de gobierno está formada por cinco regidores del equipo de gobierno y el pleno, que pretende reunirse bimensualmente, por 17 ediles.
Margalida Serra, del PP, criticó la medida por ser "poco transparente". "Decís que no hay temas para hacer un pleno mensual y por ello serán bimensuales, pero luego habrá temas que solo vais a aprobar entre vosotros. Parece que no os fiáis de vosotros mismos. ¿Por qué no hacéis plenos extraordinarios y así podemos debatir juntos?", preguntó al equipo de gobierno la portavoz popular. El alcalde Biel Ferragut justificó la medida por razones de "agilidad y eficacia".
La Escoleta municipal, el Aula Menor, los servicios deportivos, la entrada a museos, exposiciones y espectáculos, las actividades y cursos de ocio y el precio de la publicidad a través de la radio municipal serán algunos de los precios que se decidirán en junta de gobierno. De hecho, los precios de la piscina municipal ya se decidieron por junta de gobierno y cuentan con una reducción.
Guillem Crespí, edil de Deportes, afirmó que "hemos bajado precios y si comparamos los ingresos de la primera semana del mes de julio de 2014, con la primera semana de 2015 ya hemos aumentado en ingresos. No hará falta un estudio de viabilidad si seguimos en esta línea de ingresos".
Por otra parte, Catalina Cladera, nueva consellera de Hacienda del Govern, informó de que no gestionará ninguna de las áreas que tenía asignadas: Economía, Hacienda y Segunda y Tercerca edad. Cladera pidió que sus dietas se destinen a proyectos con fines sociales. Joan Pérez gestionará las áreas que deja Cladera.
