El equipo de gobierno de Binissalem, integrado por el PP en mayoría simple, ha planificado una modificación de la ordenanza relativa al cierre de terrazas y espectáculos en la vía pública. La intención es la prolongación de la hora de clausura los fines de semana.

La razón por la que el Ejecutivo local pretende llevar a cabo esta iniciativa se centra en la actividad nocturna, especialmente de la plaza de la iglesia. Como explica el segundo teniente de alcalde, José Fernández, "hay numerosos establecimientos en la plaza que en los meses de verano registran una demanda creciente". Según el concejal en la actualidad la normativa obliga a cerrar esas terrazas a las doce de la noche.

"Es algo muy riguroso que está afectando a la economía de estos locales por lo que se había pensado en prolongar ligeramente la hora para no afectar tanto al descanso de los vecinos y dar a la vez un poco de oportunidad a las cafeterías", explica.

Baile

Por otra parte, un colectivo de personas mayores organiza bailes en la plaza los fines de semana. Fernández sostiene que "llegan a agrupar a más de 200 personas y es una actividad que dinamiza mucho la vida del pueblo. No es un baile con música estridente sino más bien lo que se conoce como baile de salón".

La propuesta municipal es que se pueda cerrar a las 12,30 los viernes, y a la una de la madrugada los sábados. Esta propuesta iba a ser debatida en pleno el pasado lunes pero se tuvo que dejar sobre la mesa por un defecto de forma en la convocatoria.