Ocho grupos de canto coral y de instrumentación intervinieron en el concierto de final de curso que celebró la Associació Amics de la Música de Llucmajor. Tuvo lugar el pasado fin de semana en el marco del emblemático claustro de Sant Bonaventura.

Padres, familiares, amigos y amantes del arte musical llenaron el patio del magnífico recinto y disfrutaron de la calidad de las interpretaciones. A causa del elevado número de actuaciones, el concierto de fin de curso de este año debió celebrase en dos sesiones. A la del sábado había precedido la que habían ofrecido los alumnos de batucada días atrás. La escuela de música ha pasado de un total de 230 matriculados el pasado curso a los 265 del actual, pertenecientes a todas las edades.

En la presentación, el profesor Andreu Julià expresó la satisfacción por el excelente aprovechamiento del curso de la escuela de música y remarcó el gran aumento de alumnos de batucada, lo que ha obligado a que exista lista de espera en esta modalidad de percusión.

En el transcurso del concierto las alumnas de canto coral del grupo juvenil dedicaron un homenaje y mostraron públicamente su agradecimiento a su profesora Catalina Trobat por sus "quince años como directora del grupo".

Entre las canciones de la velada, cabe destacar la habanera -que contenía temas referentes a la localidad- interpretada por la coral de mayores y que había compuesto el llucmajorer Pere Garcies, quien estuvo presente en el monumental claustro.