Un posible pacto entre IxSP, Més y PSOE, esta fue la conclusión general a la que llegaron los ciudadanos que se acercaron el pasado miércoles a sa Congregació, donde se celebró la Asamblea que Més per sa Pobla convocó para presentar los posibles escenarios que ellos pueden generar en la formación de un nuevo gobierno municipal. Més tiene la llave política municipal.

La mesa estuvo presidida por los tres elegidos de Més: Antoni Simó, Rafel Socias y Catalina Munar.

En la Asamblea se acercó el consistorio a la ciudadanía; explicándoles a los asistentes que es un consistorio y que funciones básicas hace; aclarando que el ayuntamiento tiene unas competencias limitadas y la periodicidad en la que se reúnen, entre otras. También explicaron que era una asamblea. Mostraron todos los escenarios posibles y el mayor número de los asistentes se decantó por incentivar a los jóvenes nacionalistas a fomentar un pacto entre IxSP, PSOE y Més.

"Debemos ser valientes. Si se quieren hacer cosas hay que estar delante. Dar la posibilidad de llegar a acuerdos", expresó uno de los asistentes. Aunque también hubo algunas opiniones a favor de no pactar. "Los principios de una persona son inamovibles", expresó una asistente. "Pactar sería una falta de coherencia" o "tiene que haber más frente en la calle", fueron otras de las opiniones. Aunque el discurso general de los 60 ciudadanos presentes fue de que "cuando uno se presenta a las elecciones es para asumir una responsabilidad.

"Si queréis defender lo que vosotros creéis, vuestros valores, vuestros principios y vuestro proyecto político lo tenéis que hacer desde dentro del gobierno municipal", explicó un asistente.

Personas afines al partido y que en su momento estuvieron en la oposición también expresaron su opinión; "la oposición es un lugar frío. A veces presentas una propuesta y te votan en contra y en él próximo pleno vienen ellos con la misma propuesta y tú por coherencia, pues crees en la propuesta porque era tuya, votas a favor, y eso frustra". Nunca antes ningún partido político había convocado a la ciudanía para preguntarles su opinión después de unos comicios y antes del pleno de investidura de un nuevo alcalde.