El pleno celebrado el pasado lunes por la noche en el ayuntamiento de Santa Margalida abrió una brecha importante en el pacto municipal que ha gobernado el municipio desde principios de legislatura y deja en el aire la incógnita sobre si la entente entre Suma pel Canvi y Convergència será capaz de resistir los meses que faltan para finalizar el actual mandato. El motivo de la discordia está relacionado con la relación de puestos de trabajo que estaba incluida en el orden del día del pleno y que finalmente no se aprobó porque Convergència decidió abstenerse, mientras que la oposición de PP y Can Picafort Unit votó en contra de la propuesta.
A pesar de que el punto parecía cerrado y acordado entre las dos formaciones que forman el equipo de gobierno, el portavoz de Convergència, Joan Monjo, presentó una enmienda a la propuesta en la que solicitaba que la relación de puestos laborales dejase al margen a los funcionarios de la Policía Local, cuyos sindicatos están en contra del acuerdo por divergencias relacionadas con los complementos de productividad contemplados en la propuesta que se elevaba a votación. Suma pel Canvi votó en contra de la enmienda al considerar que la relación de puestos de trabajo "no puede votarse por partes", por lo que Convergència decidió abstenerse y el punto quedó sobre la mesa.
"Deslealtad"
La decisión de Monjo cayó muy mal entre sus socios de gobierno y el alcalde Antoni Reus (Suma pel Canvi) acusó a su partido de "irresponsabilidad" y de "deslealtad" respecto al acuerdo de gobierno suscrito entre ambas formaciones. A su entender, la propuesta de aprobación del citado instrumento es "seria y rigurosa", además de que se adapta al actual marco normativo establecido por las políticas del gobierno central.
Reus aseguró que la actitud de Convergència "ha provocado la indignación de los militantes y simpatizantes de Suma pel Canvi". La coalición revisará los acuerdos con Convergència y asegura que tendrá "muy en cuenta" este tema y otros asuntos importantes que se encuentran en fase de tramitación como la negociación de la nueva concesión de agua potable de Can Picafort y Son Serra o la tramitación de las Normas Subsidiarias.
