La plataforma pro camins públics i oberts denunció ayer que en la finca de ca na Borrassa, propiedad de la familia del alcalde, se han colocado hasta tres barreras diferentes que impiden el paso por la carretera vieja de Lluc a Pollença, por lo que han solicitado a la conselleria de Funció Pública del Consell de Mallorca la retirada de las citadas barreras y que se abra un expediente de investigación para determinar "la autoría de la usurpación del tramo de la carretera vieja de Lluc con la finalidad de evitar la repetición de los hechos". La denuncia fue registrada tanto en el Consell como en la Guardia Civil, por si "considera oportuna la apertura de diligencias".

Además, la plataforma ha denunciado el cierre del tramo que discurre entre el Pi de Son Grua y el molino de Llinars.

Por su parte, el alcalde de Pollença, Tomeu Cifre, aseguró que el cierre denunciado en su finca familiar se produjo después de varios incidentes y facilitó un documento del Consell del pasado julio en el que la directora insular de Medio Ambiente informa al edil de la próxima instalación de barreras en diversos puntos de la carretera vieja de Lluc a Pollença "para ordenar el uso público". Sin embargo, el Consell todavía no ha ejecutado esta actuación.