El pleno del ayuntamiento de Sóller se reunió este viernes de forma urgente y extraordinaria para aprobar las cuentas municipales de 2013, un día antes de entregarlas en plazo a la Sindicatura de Comptes de les Illes Balears. Estos documentos fueron remitidos al organismo autonómico para su auditoría y fiscalización.

Las cuentas fueron aprobadas con los votos favorables del PP. Entesa y Progressistes votaron en contra, al igual que la concejal María Cruz Enseñat del PSOE. El resto de ediles socialistas optaron por la abstención. Catalina Esteva, portavoz de Progressistes, puso en duda las cuentas municipales al no incorporar las de la empresa pública Sóller 2010; a lo que el alcalde Carlos Simarro le replicó que el pacto "hizo lo mismo" durante la pasada legislatura.

Según las cuentas aprobadas por el pleno, el ayuntamiento tenía, a finales de 2013, una deuda bancaria de 17,6 millones de euros y unos fondos propios de 35,5 millones. El informe de intervención señala igualmente que el ayuntamiento tuvo en este ejercicio un activo circulante de 8,6 millones de euros.

El informe de la intervención municipal señala cómo fueron requeridas las cuentas de las empresas públicas Sóller 2010 y Funeraria Municipal Sóller "y en consecuencia no han podido ser objeto de valoración" porque no le fueron entregadas. Señala que ambas empresas "no han sido inscritas en el Registro Mercantil y, por tanto, tampoco no se han podido presentar sus cuentas anuales de 2013 al Registro para su depósito y custodia en el plazo indicado".

Cabe señalar que durante el pasado año 2013 el ayuntamiento de Sóller dedicó un total de 15,1 millones de euros a gasto ordinario de uso general.