Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Entrevista

"Cualquier gestión en China atiende a rituales muchas veces rocambolescos"

Maria Antònia Company, en la azotea de su oficina en Pekín.

¿Cómo se llega de Sant Joan a Pekín?, ¿cuántas escalas vitales hacen falta?

Hay que hacer una maleta llena de curiosidad, después es todo muy fácil. Si hay un poco de suerte en las escalas y los aviones son puntuales, uno puede estar en menos de 18 horas en la capital China. Aunque antes he pasado por tres 'escalas': Reino Unido, Madrid, Sant Joan y finalmente, Pekín.

Mi 'ruta de la seda' empezó en Inglaterra cuando tenía 18 años, vivía en Oxford, aprendía inglés y compartía piso con coreanas y japonesas. Con ellas empezó mi interés por Asia. Cuando, un año después, me fui a Madrid a estudiar Turismo y Dirección y Administración de Empresas, me matriculé en una diplomatura de pregrado: Lengua y Cultura China. Tan solo éramos siete estudiantes de lo más variopintos, era 2003 y ese fue el precedente a todos los estudios que le siguieron y que todavía me tienen ocupada. La filosofía, la literatura, la cultura y la sociedad chinas han sido mis grandes intereses. Me gustaría poder hacer el doctorado en un futuro no muy lejano, y haber pasado una larga temporada en China es un requisito casi indispensable para comprender este país.

¿Por qué Pekín?

Porqué es el centro político y económico, la capital cultural e intelectual y, si le digo la verdad, a pesar de haber estudiado la lengua y la cultura previamente, no sabía muy bien lo que me encontraría en China y preferí aventurarme con cierta prudencia y comodidad.

¿Se considera usted víctima del mercado laboral español o lo suyo fue pura vocación?

No me considero una víctima porque yo ya había puesto mi rumbo hacia China mucho antes de la crisis, aunque soy muy consciente de que muchos jóvenes y no tan jóvenes han tenido que emigrar. Me gustan los desafíos, los retos, y China, desde el principio, me pareció un gran enigma, y quizás ese interés que siempre fue en aumento es lo que me llevó hasta esta cultura.

¿Con cuántas horas de retraso le llegan mis preguntas?

Tenemos una diferencia de siete horas. Cuando para usted son las doce del mediodía, aquí ya son las siete de la tarde.

Qué fue primero, ¿Ser profesora de español o decidir montar una empresa?

Primero fui profesora de chino en el Servei Llingüístic de la UIB. La editorial y la consultora vinieron después. Las clases de español son un hobby que me hace estar en contacto con la sociedad China.

Cuénteme un poco más de Long Strategic... ¿Cuál es el modelo de empresa y de cliente? ¿De qué se encargan ustedes?

Long Strategic Consultancy es una consultora especializada en China, ayudamos a empresas e instituciones, tanto chinas como españolas, a desarrollar su negocio y sus proyectos en ambos países. Ana Llorente, mi socia, es la responsable en España y yo la de China, con base en Pekín. Estamos muy centrados en turismo, cultura y educación, industrias con un gran valor añadido en las que tanto España como China tienen mucho que decir. Trabajamos entre Madrid, Palma y Pekín?a 9.222 kilómetros de distancia. Nos dedicamos a la gestión cultural, la producción de eventos, de ferias, showrooms? Diseñamos la estrategia de marketing y comunicación de nuestros clientes, organizamos la gestión logística, buscamos socios, etc? Atraemos a un perfil de cliente muy diverso, desde instituciones como el Institut Ramon Llull o el Instituto Cervantes, hasta hoteles españoles que quieren adaptar su oferta al turista chino. También hemos trabajado para artistas y?¡hasta para el equipo técnico del exentrenador del R.C.D. Mallorca, Gregorio Manzano!

¿Es difícil para una empresa española montar un negocio y hacerse un hueco en el mercado asiático?

La economía china ya es la primera del mundo. El mercado es complejo y es necesario conocerlo para beneficiarse de las oportunidades de negocio que brinda un país que sigue rompiendo estadísticas. El cliente chino es un caramelo con un papel de estaño, un tanto difícil de abrir, pero una vez se le quita el papel su potencial es incalculable. Hay que conocer la cultura empresarial y su sistema para poder hacerse un hueco; cualquier gestión en China atiende a rituales muchas veces rocambolescos. Uno debe de conocer sus cartas y jugarlas bien. Para ello hace falta un proceso de adaptación y un plan coherente con el mercado. De todos modos, cada vez más firmas españolas van cogiendo nombre y fuerza aquí. Alguno de los productos españoles estrella son el vino, el aceite de oliva y el textil.

¿Hay interés por aprender español?, ¿Cómo es el alumno chino?

El español es un valor económico en el mundo y el alumno chino lo sabe. El buen estudiante es metódico y responsable, en seis meses puede llegar a hablar un español de nivel A1. Tienen mucha dificultad en pronunciar la 'erre' ¡no es un mito!. Yo he dado clases en la Universidad de Lengua y Cultura de Beijing y en el Instituto 109; he tenido estudiantes con edades comprendidas entre los 7 y los 23 años, y la gran mayoría del alumnado responde de manera muy positiva. Creo que, en general, les gusta el español.

Tengo entendido que su sueño era tener una editorial...

Es un sueño que se está haciendo realidad. La editorial se llama Islahaidao y está especializada en China. Hemos planteado seis colecciones que darán a conocer la cultura del gigante milenario al lector hispanohablante. Un proyecto muy bonito en el que llevamos trabajando durante más de un año y que verá la luz durante 2015.

¿Ha empezado a traducir obras del chino?

Hago de intérprete muy a menudo para empresas y turistas, y traduzco a diario textos informales. Mi primera traducción oficial se publicó en mayo, en un catálogo de arte del Instituto Cervantes. Fue un texto de un académico del arte chino sobre El Jardín de las Delicias, de El Bosco.

¿Todos los chinos son iguales? ¿Sabría distinguir entre un chino, un japonés y un coreano?

[Risas] No son iguales, pero a veces no puedo distinguir a un chino de un japonés o de un coreano, del mismo modo que a veces es difícil distinguir a un español, de un holandés o de un ruso. Le diré, a modo de anécdota, que una vez en el aeropuerto de Zurich, a mi regreso después de estar una larga temporada en China, tuve la sensación de que conocía a muchas personas que se cruzaban fortuitamente conmigo en las horas de espera. La realidad era que no conocía a nadie, ¿Sería que todos los europeos me parecían iguales?.

¿Qué diferencias hay entre el idioma mandarín y el cantonés?

El cantonés y el mandarín hablado, no se parecen, pertenecen a familias dialectales diferentes. El primero es más melódico, con ocho tonos, mientras que el mandarín tiene cuatro. Además, utilizan escrituras diferentes: en Hong Kong, al igual que en Taiwán, utilizan la escritura tradicional china, mientras el resto de la China continental utiliza la escritura simplificada (una reforma de la escritura impulsada por Mao Zedong en los años 50).

El chino mandarín es la lengua más hablada del mundo con cerca de 900 millones. El cantonés, por contra, tiene aproximadamente 60 millones. Además el chino estándar está basado en el dialecto mandarín de Pekín. Yo no sé hablar el cantonés y tan solo puedo entender algunas palabras, aunque pueda leerlo y escribirlo.

¿Cómo se dice 'me suena a chino', en chino?

Buena pregunta... Obviamente no dicen "me suena a chino"... ni tampoco "me suena a mallorquín". La expresión más parecida que tienen se podría traducir como "me suena a libro de los dioses" o "suena como el idioma de los pájaros" haciendo referencia a que no comprendemos o entendemos un determinado idioma. (??????, ??????).

Como se ve desde allí el último conflicto con Hong-Kong?

No se ve. La censura, junto la escasa conversación política, no dan pie a un debate público. Mis amigos chinos se interesan a menudo por mi opinión política y solo es en círculos privados donde se comparte la crítica y el debate en este sentido.

Enumere, si puede, las tres diferencias principales que separan un chino de un mallorquín.

Mejor le diré tres similitudes: tanto el chino como el mallorquín son desconfiados (entre ellos y con el extranjero), supongo que es por la condición insular en escalas diferentes. El aislamiento de China es histórico y siempre han sido 'muy suyos', con una cultura muy fuerte. Ambos son generosos y, en general, les gusta tomarse la vida con calma. Tienen expresiones similares que hacen referencia a una vida relajada y sin estrés laboral como por ejemplo "poc a poc" (???).

¿El humor amarillo existe?, ¿Sabe algún chiste típico chino?

El programa del japonés Takeshi Kitano era esencialmente humor nipón, que consistía en el 'disfrute de la tortura' ajena. En China el humor es inocente y muy light. Los chistes más típicos se mofan de su vecino y rival histórico: Japón. Así, los del tipo "un americano, un francés, un ruso, y un japonés" siempre tienen un final desfavorable para el oriundo del país del sol naciente.

Le cambio el 'tumbet' por un plato de Pekín, ¿cuál elige?

China es un merecido viaje gastronómico. Su cocina es tan diversa como la extensión del país. La presentación a menudo suele ser sofisticada y colorida, todo troceadito para que se pueda alcanzar con los palillos. Si uno no conoce la materia prima no sabes lo que comes, los sabores son muy distintos, así como los ingredientes. Este puede ser un paraíso para los que tienen un paladar inquieto: perro, burro, insectos, flores, todo se come...

El pato pekinés es un plato delicioso, por ejemplo, aunque si me dan a elegir prefiero el tumbet ¡el que hace mi madre o mis abuelas!

Con tantos proyectos ¿Alguna vez para usted quieta?

Hay tiempo para todo, aunque es cierto que tengo temporadas de mucho trabajo. Sin embargo, me siento afortunada porque hago lo que me gusta y estoy donde quiero estar. El entusiasmo es el mejor motor productivo, así que, en este sentido, estoy en marcha todo el día pero también encuentro huecos para viajes, familia y amigos, lectura y música. Estos momentos de tranquilidad son indispensables para que el motor siga funcionando.

¿Se quedará a vivir en China o eso ya son palabras mayores?

China está muy lejos, pero todo depende de por dónde se mire. Mi vida ahora está aquí, mis amigos, mi pareja? Mi carrera profesional está principalmente ubicada en este país, aunque me siento dichosa porque la flexibilidad que me da mi trabajo me permite pasar parte del año en Europa y España, casi cuatro meses al año. Este lugar no tiene nada que ver con la Europa de los últimos años, está lleno de estímulo y cambio que creo que no podré abandonar fácilmente?

Compartir el artículo

stats