El ayuntamiento de Santanyí ya tiene ordenanzas y presupuesto municipal para 2015, que sube hasta algo más de 19,3 millones de euros. Según explicó el equipo de gobierno, el consistorio se halla en un estado pujante gracias a la reestructuración llevada a cabo en julio de 2013 por el alcalde entrante Llorenç Galmés (PP), con una reducción de un millón de euros de la partida de personal incluida, lo que ahora le permitirá reducir en un 2% el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) "pese a que el valor catastral de Santanyí es uno de los más antiguos de la Comunidad, de 1997".

Por otra parte, el consistorio se ha comprometido a congelar la mayoría de las tasas y precios públicos como el Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica, los vados o la recogida de residuos. Se eliminarán, por ejemplo, las tasas de cien euros por casarse, o la que gravaba a los vehículos si estos demuestran tener más de 30 años de antigüedad.

Según Galmés "los presupuestos son realistas y adaptados a las necesidades actuales. Hemos tratado la economía del Ayuntamiento como lo hacemos con la de casa, sin gastar más de lo que teníamos. No invertiremos en proyectos ambiciosos si no tenemos el capital para hacerlo".

Mucho más escépticos se mostraron los representantes tanto de Proposta per les Illes (PI) y Esquerra, quienes decidieron abstenerse.