Los vecinos de la urbanización de Sant Marçal, en el municipio de Marratxí, que fue recepcionada en el año 2003 por parte del Ayuntamiento, siguen con su odisea en cuanto a un suministro eficiente de la red de agua potable, a pesar de los años transcurridos desde que se detectaron los primeros problemas.

Todos los problemas vienen derivados de unos vicios ocultos en la tubería de la conducción del agua potable, denunciada en su día por la concesionaria Aguas Término de Marratxí. Desde el primer momento se fue detectando un aumento de las roturas y al inspeccionar las mismas se pudo comprobar que la causa eran unos defectos de fabricación de los tubos o de mala instalación en toda la red.

El pasado miércoles se mantuvo una reunión entre la concesionaria, representantes del consistorio de Marratxí y vecinos de la citada urbanización sin que se llegara a un acuerdo para solucionar este problema que afecta a los residentes desde hace una década. Los vecinos lamentan que a medida que transcurre el tiempo van en aumento las roturas de la tubería, así como las pérdidas de agua por las deficiencias observadas en la instalación.

El concesionario no quiere eludir su responsabilidad en la reparación y en el mantenimiento de la red, pero opina que se trata de un problema de deficiencia en la fabricación de los tubos o de la instalación de los mismos, totalmente ajeno a su gestión de dar sevicios.

Responsabilidades

La empresa concesionaria opina que debe ser el ayuntamiento de Marratxí, la institución que recepcionó la obra, quien debe exigir responsabilidades a los promotores y constructores de la urbanización a fin de proceder a la renovación de la totalidad de red.

Actualmente se siguen produciendo nuevas roturas en las tuberías que se arreglan mediante bridas de reparación. Incluso en algunas calles de la urbanización de Sant Marçal se han instalado tubos de pequeño diámetro encima de las aceras para poder dar el servicio que los vecinos demandan desde hace muchos años a la espera de una solución definitiva.