El jefe de la Policía Local de Calvià, José Antonio Navarro, en prisión preventiva desde el pasado lunes junto a otros dos agentes por su presunta participación en una trama de corrupción, se habría sentido chantajeado por una serie de empresarios de la calle Punta Ballena de Magaluf que, en una reunión mantenida a finales del pasado mes de julio, le informaron de la existencia de un vídeo grabado en agosto de 2013 que demostraría la supuesta trama de extorsión protagonizada por agentes policiales.
Según se argumenta en el recurso contra el auto de ingreso en prisión presentado ayer en el juzgado por el abogado de Navarro, Jaime Campaner, el jefe de la Policía Local de Calvià admite la celebración de la citada reunión con empresarios de la zona y que le ofrecieron visionar el vídeo comprometido, a lo que el agente se negó instando a los dueños de locales de ocio que lo habrían grabado a denunciarle si creían que se había producido alguna ilegalidad. Asimismo, tal y como informó ayer este diario, el propio Navarro les habría amenazado con interponer denuncia por calumnias contra ellos en el caso de que difundieran el documento por internet.
El supuesto chantaje denunciado por el policía encarcelado consistiría en la posibilidad, supuestamente ofrecida por los empresarios, de silenciar el vídeo a cambio de que la Policía Local suavizara las inspecciones a los locales y la persecución contra determinados locales de Punta Ballena tras el escándalo desatado con la difusión del vídeo de la felación colectiva.
Los abogados de los tres policías que se encuentran en prisión presentaron ayer los recursos contra el auto judicial que decretó el ingreso en la cárcel, en los que solicitan la excarcelación inmediata de sus representados debido a que éstos no tienen intención de destruir pruebas porque ha pasado un tiempo suficiente para que el juzgado realizase las investigaciones necesarias sobre el caso. También aseguran que no huirán de la acción de la justicia porque todos ellos tienen arraigo en la isla. Los presuntos delitos que se imputan a los tres agentes de Calvià son los de extorsión, contra la salud pública, coacciones, omisión del deber de denunciar y amenazas. Cabe recordar que, además del jefe Navarro, están en la cárcel el jefe de la unidad de la policía canina, Miguel P., representado por Miguel Arbona, y el agente Antonio S., representado por Gaspar Oliver.
El juzgado de instrucción número doce de Palma, que investiga el caso de la presunta trama de corrupción en la Policía Local de Calvià, siguió ayer con las pesquisas mediante el interrogatorio a diversos de los empresarios que estarían implicados en la grabación del polémico vídeo por el que se decretó la prisión de los tres funcionarios policiales.
Por otra parte, la portavoz del Govern, Nuria Riera, aseguró ayer que el ejecutivo apoya a las fuerzas de seguridad de la comunidad y colabora con la Justicia y desvinculó a la Policía Local de Calvià de la trama que se investiga en este municipio al considerar que “las posibles irregularidades en Calvià corresponden a personas, no a instituciones”.
