Unos 3.100 árboles ya han sido plantados por voluntarios en la finca de Sa Gramola del municipio de Andratx tras el desolador incendio que arrasó durante el pasado verano más de 2.300 hectáreas de masa forestal de la Serra de Tramuntana.

Cada sábado, Protección Civil de Andratx organiza expediciones desde el Castell de Son Mas, sede del Ayuntamiento, hasta la finca de Sa Gramola para colaborar en la reforestación de la Serra. Hasta la fecha, la labor altruista ha contribuido especialmente en la limpieza de la zona, construcción de presas para evitar la erosión del suelo y la siembra controlada de los árboles en unas cinco hectáreas de superficie. Poco a poco el color verde empieza a destacar en un panorama desolador.

Nada más empezar, un técnico del Ibanat, Marcos Soriano, ofrece una explicación a los voluntarios basada en la importancia de las tareas que se llevan a cabo en la zona, cómo sembrar los árboles y los espacios que hay que dejar entre los mismos para que crezcan sin problemas.

Durante los últimos sábados han acudido a Sa Gramola diferentes entidades. Ayer le tocó el turno a la Penya Barcelonista de Peguera, encabezada por su presidente, Sebastián Palmer, que consiguió aglutinar a voluntarios de Andratx y Calvià.