­Los actos conmemorativos para celebrar los 30 años del Castell de Capdepera como monumento municipal, empezaron ayer tarde con un homenaje a todos los presidentes y miembros del patronato que ha habido y la proyección de imágenes antiguas de la fortaleza, cedidas por Climent Garau. Ses Madones de sa Llata hicieron entrega del galardón que acredita el paso de la propiedad privada a la titularidad pública, en 1983.

En el siglo XIV y por orden del rey Jaume II se concentra la población de la zona y se construye un recinto amurallado cerca de la torre de vigilancia ya existentes de Miquel Nunis, encima de la colina desde donde se divisa el pueblo y el canal marítimo entre Mallorca y Menorca. Primero se levanta una iglesia y después las murallas a las que se le van añadiendo torres fortificadas.

Inicialmente se construyeron dentro unas 50 casas que debido a los ataques pasaron a ser 150 en el siglo XVI. El actual pueblo de Capdepera se conformó a partir del siglo XVII, cuando los pobladores del Castell empezaron a abandonarlo para situarse a sus pies.

En el siglo XVIII la vigilancia pasa a manos de militares profesionales. De esa época es la denominada Casa del Governador, una de las pocas viviendas conservadas en el interior. Los cuerpos estatales abandonan la fortaleza en 1854, momento en que el Castell pasa a manos privadas. Hasta que el 1983 es donado al ayuntamiento de Capdepera para su rehabilitación y conservación. En el año 2000 se cumplieron los 700 años de su edificación.

Actualmente puede visitarse todos los días del año pagando una pequeña entrada. Los actos durarán hasta diciembre.