Todos aquellos vecinos de Petra que a partir de ahora sean multados por la Policía Local y cuyos ingresos sean inferiores al salario mínimo interprofesional, podrán cambiar dinero por horas de trabajo. Cada 25 euros de sanción equivaldrán a una jornada de cuatro horas acompañando a los tres funcionarios de la brigada municipal, pintando, asfaltando o arreglando jardines.

La alcaldesa de Petra, Caterina Mas (PSM) defiende la medida para evitar males mayores: "Estamos preocupados porque cada vez hay más gente en situación precaria en los municipios pequeños. Esta es una forma alternativa de que puedan pagar sus multas sin que se les tengan que embargar sus cuentas".

La iniciativa es una medida similar a la que ya funciona en otros municipios del Estado, como Madrid. Un juez es quien determinará la sanción que le corresponde a cada infractor. Después los Servicios Sociales petrers son los responsables de verificar sus ingresos y situación, "entonces el Ayuntamiento lo que hará es llevar un seguimiento de los trabajos y hará que firmen tras cada día trabajado".

A principios de año

Está previsto que la alternativa laboral sea publicada en breve en el Botlletí Oficial de les Illes Balears (BOIB) y pase un mes de exposición pública, con lo que el consistorio calcula que será efectiva a partir de enero de 2014.

"Si no se paga la multa, automáticamente va a recaudación, que precinta las cuentas. Hasta ahora eso no suponía un gran problema, pero ahora hay gente que solo ingresa un subsidio y no lo pueden asumir", añade Mas, quien pese a ello señala que "hasta ahora teníamos muy poca gente que no cumpliera con las multas, pero se podía agravar", y reconoce que "muchas veces cumplimos menos nosotros como administración en general que los vecinos" e insiste que se trata de una forma de ayudar a sobrellevar la crisis.