Los residentes en el Port de Pollença volverán a quedarse esta temporada sin las plazas de ORA reservadas exclusivamente para ellos, tal y como se había comprometido el Ayuntamiento hace un año, cuando decidió reimplantar el sistema de aparcamiento regulado en el núcleo.
El alcalde de Pollença, Tomeu Cifre (PP), confirmó ayer que la llamada zona verde prevista en el estudio inicial de reimplantación de la ORA, y que tenía el objetivo de reservar plazas gratuitas a los residentes previo pago de veinte euros anuales, no se estrenará esta temporada porque el Ayuntamiento "no lo ve nada claro" y porque en la actualidad "concentra sus esfuerzos" en el plan de movilidad que permitirá, tal vez el próximo año, poner en marcha una nueva experiencia de semipeatonización en la primera línea del Moll ´pollencí´.
Por ello, las plazas de aparcamiento de pago que se habilitarán este año serán las mismas que ya fueron reguladas el pasado verano. La zona azul está integrada por unas 300 plazas de aparcamiento distribuidas en los principales ejes urbanos y comerciales, básicamente en la avenida Joan XXIII y la carretera de Formentor, además de las calles adyacentes a la zona peatonal de la plaza Miquel Capllonch.
La implantación, un año más, del aparcamiento de pago depende del convenio, todavía pendiente de firma, entre el ayuntamiento de Pollença y Ports de les Illes Balears para que las aproximadamente noventa plazas de aparcamiento situadas en la primera línea, en terreno que es de la competencia de la citada entidad pública, también sean incorporadas al paquete de aparcamientos integrados en la ORA. Las plazas de pago volverán a ser explotadas este año por la misma empresa que se hizo con la concesión el pasado año.
El alcalde no considera un perjuicio para los residentes el hecho de que no se reserven plazas para ellos. Asegura que no ha recibido ninguna crítica al respecto y añade que los ´molleros´ podrán aparcar igualmente en los aparcamientos que, en principio, estaban reservados a la zona verde porque "seguirán siendo gratuitos". En cualquier caso, no descarta la posibilidad de habilitar algún nuevo aparcamiento público en algún punto del núcleo costero.
La habilitación de la zona verde ya se descartó a principios del pasado verano porque su puesta en marcha era más complicada y dependía de otras cuestiones relacionadas con el padrón.
