El pleno del ayuntamiento de Artà manifestó en la tarde de ayer su rechazo al proyecto de construcción de un complejo vacacional en el Área Natural de Especial Interés (ANEI) de sa Canova. Todos los partidos, excepto el PP, expresaron su oposición al proyecto para la construcción de 200 bungalows en 60 hectáreas (inversión de 70 millones de euros).

Iniciativa Verds presentó con éxito una moción que acordaba que el ayuntamiento mantendrá e incrementará, si cabe, la protección de este "emblemático espacio natural protegido". Asimismo, el consistorio reclama al Govern la redacción y envío al Ministerio de Medio Ambiente y la Comisión Europea, del Plan de Gestión correspondiente al LIC de na Borges. También se reivindica la ejecución en su totalidad del proyecto de ordenación de uso público y protección del litoral y dunar. Por último se propone trasladar el conjunto de acuerdos a los ayuntamientos de Manacor, Petra y Santa Margalida (afectados por el LIC de na Borges) por si se suman.

El pacto UIA-CxI admitió que no hay un proyecto firme presentado, solo ha habido conversaciones. El PSOE apoyó también la moción. Iniciativa Verds teme que la actual política del Govern hiciera viable el polémico plan.

El PP defendió su desmarque por los puestos de trabajo (cerca de 150). "Si la costa tuviera algunos metros de inversión turística, el pueblo de Artà a lo mejor no estaría tan mal", sostuvo.