El alcalde de Santa Margalida. Miquel Cifre (PSOE), cree que el hecho de que un grupo de estudiantes norteamericanos se haya interesado por la finca de Son Real es una prueba más de la importancia estratégica del predio, algo que, a su entender, no ven las instituciones isleñas porque, según apunta, "aquí no hay ciervos ni langostas", en referencia a la polémica cacería del conseller de Turismo y al escándalo protagonizado por los consellers Bosch y Company en Cabrera.

Cifre reitera que la finca de Son Real "está abandonada" y que tanto el Govern como el Consell "pasan olímpicamente" de la ´possessió´. El alcalde socialista no oculta su preocupación por una posible "privatización" de la finca por parte del Govern autonómico.