Sábado por la mañana, en plena plaza de sa Bassa de Manacor. El cielo está plomizo, amenaza con llover y un viento frío no acompaña precisamente el paseo. De repente, varios miembros del colectivo Dones de Llevant entran en acción y todo parece cambiar. Cuelgan carteles explicativos y van acumulando adeptos poco a poco, hacia una especie de escenario improvisado desde donde actuar.

"Invitamos a la ciudadanía a fotografiarse con gestos cariñosos, de ternura, expresando en definitiva su rechazo a la violencia en general y a la machista en particular", apunta su presidenta, Antònia Matamalas, principal impulsora de la curiosa iniciativa, vestida de morado y con un mechón lila entre su pelo blanco. "Hay demasiadas malas noticias y queríamos salir de todo ello, pensar qué podíamos hacer. Quiero que la gente piense en positivo, alegrar a los que paseen por el centro, al mismo tiempo que se colabora en la erradicación esa lacra que es la violencia de género".

Besos, abrazos y todo tipo de gestos cómplices eran retratados con profusión por la afamada fotógrafa Anna Esgleas, reconocida por su labor dentro del fotoperiodismo, catálogos de moda y colecciones privadas. Posturas naturales, sonrisas y vuelta a empezar. Pero... ¿para qué servirán todas estas instantáneas cazadas al vuelo? "Hay una segunda fase que tendrá lugar el próximo fin de semana aquí mismo". Y es que el domingo 25 el colectivo tiene previsto exponer todas las fotos en pleno corazón de la ciudad "junto con una serie de actividades complementarias, todas ellas relacionadas con el mundo de la cultura y el arte".