El pleno de Son Servera aprobó ayer por unanimidad dejar de mantener "cualquier tipo de relación" con las entidades bancarias que hagan efectivos desahucios dentro del municipio, explicó el alcalde Pep Barrientos (PSOE).

En un principio la moción de urgencia acordada en comisión de gobierno por todos los grupos a excepción del PP, hacía hincapié en declarar ´non gratos´ a los bancos y cajas que desahuciaran a familias serverines, además de no prestar a la Policía Local para tales menesteres. A última hora el PP pidió cambiar el texto de la moción para dar su apoyo. "Viene a ser lo mismo" reiteró el socialista, "no se trata de un capricho sino de afrontar una situación que ha durado demasiado tiempo, y que hemos observado con los brazos cruzados. Es una herramienta para poder presionar a las entidades".