El equipo de gobierno del PP presentó en sesión plenaria una modificación de crédito para afrontar un primer pago, de 107.000 euros, por el solar de la calle Blanca de Son Penyaflor que en 2003 dejó de ser edificable y pasó a convertirse en zona de aparcamientos tras aprobarse una nueva normativa urbanística. El Jurado Provincial de Expropiaciones valoró recientemente en un millón de euros estos terrenos y el Consistorio se ve forzado ahora a ejecutar la compra.

El hecho de que el actual alcalde, Joan Simonet, fuera el edil de Urbanismo que en 2003 elaboró las Normas Subsidiarias, y algunas manifestaciones previas de miembros de la oposición en las que solicitaban responsabilidades, hacían presagiar un debate más acalorado de lo que finalmente se vivió en la sala de actos de Alaró. Y prueba de esa previsión fue que tanto el alcalde como varios miembros de su equipo asistieron a la sesión con datos para rebatir unas acusaciones que, finalmente, casi no se produjeron. Así, tras la primera intervención de los portavoces, Esquerra criticó la "falta de previsión", el PSM lamentó "la falta de información", y sólo el PSOE elevó un poco la crítica para acusar al PP de "una mala gestión urbanística que perjudica a todo el pueblo".

La respuesta del PP fue más contundente. Simonet señaló al PSOE -que gobernó junto a UM entre 2003 y 2007- como el responsable de la situación actual por no haber comprado el solar. El edil argumentó que la normativa llevaba un estudio económico que preveía comprar el solar con lo que se ingresara con las urbanizaciones previstas, pero cuando se iniciaron esos proyectos, los socialistas no realizaron la compra.

El alcalde también aportó las cifras ingresadas en aquella época: "Cobrásteis 250.000 euros por el proyecto de la calle Solleric y 240.000 por el de S´Escorxador", aseguró mirando a los ediles del PSOE. El concejal de Hacienda, Gabriel Simonet, se sumó a la defensa de la gestión popular aportando más datos: "En vuestros cuatro años se hicieron préstamos por valor de 3,5 millones y no se destinó nada a comprar el solar", añadió.

Pelotazo urbanístico

Además de estos argumentos ´oficiales´, los ediles del PP defienden en privado su gestión asegurando que cuando se redactaron las normas -durante el pacto PP-PSM-, se decidió ubicar un aparcamiento en el solar para desactivar un ´pelotazo´ urbanístico ideado en los años del alcalde socialista Francesc Rosselló.

Y a la hora de señalar responsables en su propio equipo de gobierno de entonces, no dudan en cargar culpas en quien era su socio y al que hicieron alcalde del municipio: Josep Gomila (PSM). Aseguran que existían cuestiones personales entre él y el propietario del solar, lo que provocó que decidieran perjudicarle eliminando la posibilidad de construir en sus terrenos.