A los vecinos que no cumplan con la normativa para junio de 2013 y no tengan un contador individual se les cobrará el agua a precio de un servicio no esencial, como las piscinas comunitarias o el riego. Es decir, que la tarifa se triplicará. Así lo especifica la disposición transitoria del nuevo reglamento del servicio de aguas que, en ningún caso, contempla el corte del servicio por ese motivo.

De momento, Aqualia ha visitado unas 150 comunidades para dar el visto bueno a la ubicación propuesta para los nuevos contadores, que han de estar en un espacio común en el interior de la finca o bien en la fachada. Aún no hay cifras de cuántos de los 535 edificios ya se han adaptado a la normativa.

En la carta que ha remitido Aqualia durante el verano a los vecinos, se destacan las ventajas que, según la empresa concesionaria, tienen los contadores individuales: "Ahorro de hasta un 25% del consumo de agua, un mayor control sobre el consumo al ser individual, facilita la detección de posibles fugas, mejora la presión hasta la entrada de cada piso", afirma la misiva. Tanto la normativa municipal como la autonómica obligaba a tener contadores individuales, aunque en Llucmajor aún no se había dado orden de cumplirlo.