Llucmajor

Los vecinos de Badies amenazan con denunciar al alcalde

Aseguran que emprenderán acciones legales si no les muestran las licencias de las antenas de telefonía móvil

AITOR F. VALLESPIR

­La agrupación Gadma de Badies amenaza con denunciar al alcalde de Llucmajor, Joan Jaume Mulet (PP), si el consistorio no les facilita las licencias en vigor de las antenas de telefonía móvil instaladas en sus núcleos de población.

Esta asociación, formada por vecinos de las urbanizaciones de Badia Gran y Badia Blava que quieren trasladar las antenas de móvil fuera del casco urbano, asegura que las antenas de móvil carecen de algunas de las licencias que necesitan para estar en marcha.

Por eso, han solicitado en reiteradas ocasiones al ayuntamiento mediante instancias que les entreguen la documentación pública que posee el consistorio respecto de estas instalaciones.

"Llevamos años solicitándolas", afirmó uno de los portavoces, Alejandro Larrea, en relación a la antena de Badia Gran, "y no nos han respondido". A raíz de eso, los vecinos llucmajorers afirman que están estudiando "emprender acciones legales contra la administración y contra el alcalde" si no responde a esta petición. "Si los permisos están en orden, ¿qué problema tienen para enseñárnoslos?", añadió Larrea.

Estudio de radiación

Además, lamentan que el alcalde todavía no les haya mostrado los resultados del estudio de radiación encargado por el Ayuntamiento de Llucmajor al Govern. "En el pasado pleno, dijo que nos facilitaría los resultados y todavía no lo ha hecho", afirmó el portavoz de la agrupación.

El estudio encargado por el Govern señaló que la radiación de telefonía móvil en Badies era 450 veces menor al máximo permitido, aunque según los vecinos no se elaboró de forma correcta, ya que solo midieron un punto por antena. "Los técnicos que hemos consultado dicen que hace falta medir diez puntos por antena, no solo uno", dijo Larrea. Por ese motivo, anuncian que solicitarán a una empresa privada que elabore otro estudio de manera independiente.

Además, indicaron que acudirán al pleno del próximo miércoles para volver a hacer sentir su malestar, que se ha incrementado desde que hace unos días se instalaran nuevas placas en la antena de Badia Blava.

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