Miembros de la ´plataforma pro camins públics i oberts´ han presentado una instancia en el ayuntamiento de Pollença mediante la que reclaman el "restablecimiento de la legalidad urbanística" en la carretera vieja de Lluc a Pollença, al haber constatado la existencia de obras con el objetivo de automatizar el cierre de la barrera que impide el paso en l´Empeltada, una de las fincas que presenta más problemas de paso en esta antigua ruta reivindicada como pública y que el Consell de Mallorca incluyó en el inventario de bienes públicos de la institución el pasado mes de mayo.

El pasado 18 de junio, con motivo de una prueba deportiva que se desarrollaba en la carretera vieja de Lluc a Pollença, los denunciantes explican que los participantes se encontraron con una barrera cerrada en la finca de l´Empeltada y la existencia de unas obras recientes con el objetivo de "electrificar el cierre de las barreras", lo que "impide la libre circulación y el uso de la vía".

En la instancia remitida al Ayuntamiento, los miembros de la plataforma recuerdan que el Consell de Mallorca inventarió la carretera vieja y que por ello, "no puede realizarse ninguna obra que impida su normal uso", por lo que "debería actuarse lo más rápido posible tanto por parte del Consell de Mallorca como por parte del ayuntamiento de Pollença". El escrito va acompañado de una serie de planos para ilustrar la situación exacta de la colocación de la barrera.

Por todo ello, solicitan al Consistorio que "se restablezca la legalidad urbanística alterada por las obras descritas" y que "se suprima la barrera que impide el libre paso por la carretera vieja de Lluc a Pollença".

Cabe recordar que la citada barrera de entrada a la finca de l´Empeltada fue el escenario en marzo de 2009 de un acto reivindicativo mediante el que miembros de la plataforma favorable a la apertura de los caminos públicos retiró las barreras metálicas de la finca para trasladarlas a la sede de Territorio del Consell, en Palma, con el fin de llamar la atención a la institución insular y denunciar su "pasividad" para hacer frente a la problemática del cierre de rutas.