El colectivo ciudadano Alternativa al Tren, contrario a la construcción de la nueva línea del tram-tren de Manacor a Artà, criticó ayer el exceso de hormigón donde se están empezando a encajar los nuevos railes del futuro convoy, y "el enorme ruido", que según el grupo causará está nueva infraestructura que la conselleria de Movilidad del Govern espera poder inaugurar antes de 2012.

"Personalmente no creo que la obra llegue nunca a funcionar, hay estudios que ya demuestran que será completamente deficitaria", señala la presidenta de Alternativa, Claudia Gelabert. "Una serie de técnicos de la misma obra nos han confesado que estas bases de hormigón prefabricadas y que se unen a una base del mismo material, serán altamente ruidosas. No se puede seguir utilizando el tren para ganar votos", apunta Gelabert, quien confiesa a su vez que el grupo ha mantenido ya una serie de reuniones con Unión, Pueblo y Democracia (UPyD), para que estos lleven sus reclamaciones en su próximo programa electoral de las elecciones municipales.

El Govern indica que las obras "continuarán como hasta ahora", alegando de que se trata de un ferrocarril moderno y racional".