La revetla de Santa Maria la Major no se quedó anoche sin su tradicional baile de diablos alrededor dels foguerons. Faltó muy poco para que se produjera el plante anunciado y sólo la intervención a última hora del alcalde, Rafel Torres, posibilitó que la colla de diablos tradicionales y otra de reciente creación aceptarán una tregua.

El nombre de Inca fue la causa de la disputa. Los jóvenes que han fundado una nueva colla –de diablos de fuego– registraron el nombre de Dimonis d´Inca sin saber que existía una colla tradicional –que no es de fuego, sino de baile– que lleva usando el nombre hace 25 años, aunque sin registrarlo oficialmente.

Tras los enfrentamientos de la semana pasada, la revetla de anoche se celebró sin mayores sobresaltos y siguiendo el programa oficial. Durante el día hubo algunas competiciones deportivas. A las 19.30 horas tuvo lugar la salida del pasacalles integrado por los cabezudos del Ayuntamiento y por la banda de tambores y cornetas Juventut d´Inca. Partieron de la plaza de España y abrieron camino a las autoridades que se dirigían a Completes en la iglesia parroquial de Santa Maria la Major.

Tras la celebración de Completes, a las 20.45 horas, tuvo lugar el lanzamiento de cohetes y repique de campanas que da señal a toda la ciudad para que se enciendan los foguerons. Como marca la costumbre, el de la iglesia fue encendido por el párroco y por el alcalde al unísono. Tras levantarse las llamas llegó el momento esperado del baile de los diablos que arrancaron los aplausos de agradecimiento por parte de la multitud congregada. Alguno de sus miembros manifestó que lo hicieron para no romper la tradición y tras la promesa del alcalde de que podrían mantener su nombre de siempre.

Los diablos de Inca bailan una canción popular denominada el coro dels dimonis extraída de Pastores a Belén, obra que tenía hace años una gran tradición teatral en la capital del Raiguer y que se solía representar en Navidad. Tomas y Miquel, los xeremiers de Sineu se encargaron de hacerla sonar una vez más ante las llamas.

Atuendo único

La vestimenta de la colla diablesca es también muy especial pues no se parece a ninguna otra. Fue copiada de una talla etrusca descubierta hace años en una finca rústica de la ciudad. Estos diablos no lucen cuernos aunque si una cresta de gallo y unas curiosas orejas de lobo.

Inca fue realmente tomada anoche por el fuego de decenas de foguerons y un correfoc a cargo de los Dimonis de Sineu. Anteriormente, este correfoc se llevaba a cabo la víspera del Dijous Bo.

Cabe destacar que, aunque Santa Maria la Major no es patrona oficial de la ciudad, su festividad siempre se ha celebrado de manera solemne y con grandes manifestaciones populares. El alcalde sostiene que "es muy lógico que no sea patrona oficial porque no precisa que se le declare. Antiguamente Inca contaba con una sola parroquia por lo que no era necesario declarar a Santa Maria la Major como patrona, todo el mundo lo tenía asumido, y en la actualidad todos los inquenses la llevamos en el corazón como patrona de la ciudad al igual que Sant Abdó y Sant Senén?.