Más de 60 calles de Inca se cerrarán al tráfico durante el Dijous Bo, según anunció ayer el concejal de Ferias, Felip Jerez, en la presentación oficial del evento.

En la calle habrá más de 400 personas trabajando en la organización. Según explicó ayer el concejal, la Policía Local contará con 100 agentes; la plantilla se reforzará con policías cedidos por municipios vecinos durante ese día. Además de dichos agentes habrá algo más de 300 personas entre vigilantes jurados, guardias civiles y funcionarios municipales que cuidarán de diferentes aspectos de la seguridad y del ordenamiento de los expositores y puestos de venta.

El mercado payés es la parte de la feria que más crece este año. Los requisitos para los vendedores se mantienen: vestido payés, puesto de madera o ambientado a la antigua y selección de los productos a vender (embutidos, ropa antigua, ropa de cocina, artesanía, verduras, herramientas, ferretería).

En cuanto a la enorme coca de quarto, que elaborará la Associació de Forners i Pastissers y patrocinará la Cadena Ser, cabe destacar que se utilizarán 250 kilos de azúcar, 250 kilos de harina y 550 docenas de huevos. En total, saldrán 25.000 raciones que serán repartidas entre todos los visitantes.

Miquel Sbert, presidente de los pasteleros, explica que "la coca de quarto es el reto más difícil que nos hemos planteado desde que elaboramos el monumental pastel del Dijous Bo". Sbert explica que "ya de por sí es difícil encontrar el punto de esponjosidad óptimo, pero mucho más lo será mantenerlo fresco desde la noche anterior hasta que se reparta".

Las autoridades presentaron el programa oficial vestidas a l´ample y solicitaron que la gente haga lo mismo el dimecres bo.