Embargos y más embargos
Cualquier método es bueno para rastrear las dimensiones de la crisis en Calvià. Está el método de simple observación visual: los numerosos comercios que se venden o se traspasan, las largas colas en las oficinas del paro... Y también existe el método documental: los textos oficiales que registran los impagos, las deudas... Un ejemplo de esto último se puede encontrar en un número del BOIB de la pasada semana. Trae casi una decena de notificaciones de embargo de bienes inmuebles. Pisos, casas y fincas cuyos propietarios adeudan en concepto de pago de impuestos o multas de tráfico miles de euros. La deuda más elevada asciende a 111.406,43 euros. Todos estos embargos son recurribles, pero ayudan a dibujar el escenario de la crisis.
Frases reveladoras
"Está todo muerto. Casi da miedo ir por la calle. No hay nada abierto". Frase pronunciada ayer por un representante político calvianer que sintetiza en qué consiste la hibernación anual del municipio.
