El ayuntamiento de Calvià ultima un acuerdo de colaboración con la propiedad de la torre de defensa de Cala Figuera para la rehabilitación de la estructura, que data del año 1579 y que se halla en muy mal estado de conservación, tal y como han denunciado en los últimos años diversas entidades conservacionistas como ARCA.

El convenio contará también con la participación del Consell de Mallorca, según explica el director insular de Patrimonio, Biel Cerdà, quien agrega que la reforma llevará aparejada la habilitación de un paseo peatonal por la costa para que la gente tenga un fácil acceso a la histórica estructura defensiva.

Cerdà detalla que Patrimonio aportará a la restauración el trabajo especializado de la brigada insular de este departamento insular, mientras que el Consistorio calvianer asumirá los gastos del material de obra necesario. A la espera de que se acaben de concretar los flecos de la tramitación administrativa, agrega, se trabajará en el apuntalamiento de la estructura.

"La torre de Cala Figuera es un Bien de Interés Cultural [BIC] desde 1949. Actualmente se encuentra en muy mal estado. Ha recibido muchas denuncias de particulares y de asociaciones como el Grup d´Estudis per la Defensa de les Fortificacions alertando de su degradación", explica el director insular.

No se trata de la única fortificación cuyo estado de conservación no es óptimo.

Recientemente, ARCA denunció que parte de la fachada de la construcción defensiva de Illetes, de 1597 y situada delante del actual club militar, se había caído y que el conjunto de la edificación corría el riesgo de derrumbarse. Calvià cuenta también con torres en es Castellot (Santa Ponça), Portals Vells y Torrenova.