Los promotores del parque temático de Tierra Santa –ambientado en el Jerusalén de los primeros años del crisitanismo– tienen pocas dudas acerca de que Mallorca es la ubicación ideal para desarrollar esta idea en Europa, después de que ya está implantada en Buenos Aires (Argentina) y Orlando (Estados Unidos). Sin embargo, aún no está claro qué municipio podría albergar esta infraestructura lúdica.

La promotora de la iniciativa en Europa, la empresa Sigma, entabló un primer contacto con el ayuntamiento de Capdepera, pero ahora la situación ha variado. Ante el temor de que el proceso se retrase demasiado por problemas estructurales en el solar previsto de Son Barbassa, ha abierto las puertas a otras localizaciones, sin descartar todavía del todo al municipio gabellí. Ayer, representantes de Sigma y del bufete de abogados Alemany-Estela, que ejerce el asesoramiento legal de la promotora, se reunieron con el alcalde de Alcúdia, Miquel Llompart, para explorar la posibilidad de ubicar el parque temático en el término. Y, para los próximos días, Sigma prevé encuentros con alcaldes de otros municipios.

El proyecto implica la construcción de un parque temático ambientado en la Tierra Santa, lo que ha sido bien visto desde el Obispado de Mallorca aunque no se trate de una idea promovida desde la Iglesia, como aclaran sus promotores. Según explica el relaciones públicas de Sigma, Jorge Borrell, la inversión aproximada ascendería a más de 20 millones de euros e implicaría la creación de unos 550 empleos permanentes. El número de visitantes previstos, agrega, rondaría las 60.000 personas al mes. Los jefes de la empresa matriz, que desarrolló primero el concepto en Buenos Aires, no quieren que la tramitación del proyecto se retrase más de un año.

Por eso, consideran prioritario cerrar pronto la ubicación del solar –que debería tener una superficie mínima de 50.000 metros cuadrados–, para comenzar cuanto antes en el Consell de Mallorca los trámites a fin de lograr la declaración de interés general. Los plazos que maneja la promotora es que, una vez obtenidos todos los permisos, la obra podría estar acabada en un año.

El de la Tierra Santa no es exactamente un parque temático al uso con atracciones donde montarse. En cambio, basa su atractivo en la cuidada ambientación de los primeros años de la era cristiana.

Tomando como referencia la estructura del parque ya existente en Buenos Aires, éste cuenta con espectáculos de luz y sonido que recrean el origen de la vida en la Tierra o La Última Cena de Jesús con sus apóstoles. También ofrece una recreación del emblemático Muro de los Lamentos y un pesebre animado con capacidad para 400 personas.

Además, tiene restaurantes con nombres de resonancias bíblicas, como El Arca de Noé, y tiendas de recuerdos.