La zona peatonal del centro de la ciudad se convertirá en la recreación de un Dijous Bo de principios del siglo XX. El Ayuntamiento ha contado con la colaboración del cronista oficial de Inca, Gabriel Pieras, para documentarse.

Pieras explica que "el corazón del Dijous Bo era la zona de la calle Jaume Armengol. Nos lo demuestran los topónimos del lugar. Tenemos allí la calle Garroves, Comerç, Feria, nombres que demuestran la relación. Además de ello había unos 50 cellers en los alrededores", afirma.