Este año el Santuari de Lluc conmemora diversos acontecimientos con motivo del 125 aniversario de la Coronación Pontificia de la Mare de Déu de Lluc. A Ello se suma el centenario de la construcción del pujol dels Misteris. Fue el obispo de Mallorca Joan Pere Campins que, con motivo de la celebración en el año 1884 del 25 aniversario de la Coronación decidió que en Lluc se realizara algo significativo para recordar la efeméride. De ahí que se reuniera con diversos arquitectos como Gaudí, Rubio y Reynés, además del ingeniero Guillem Carbonell, que idearon el trazado, al igual que los monumentos que a lo largo del mismo acompañan el camino. La idea prosperó y el lugar se convirtió en un sitio idóneo para rezar el rosario. Además, el ambiente del lugar invita a la plegaria y a disfrutar de un ambiente de paz.

El lugar que eligieron para realizar esta obra fue donde la tradición cuenta que un pastor halló la Virgen. Antes del actual trazado, que acabó de empedrarse en el año 1994, sólo se ascendía al mismo por un pequeño camino que conducía hasta la encletxa donde, según la leyenda, se encontró la figura de la Mare de Déu.

Las obras de adecentamiento del camino, según narra el padre Bartomeu Pericàs en un artículo sobre el Camí dels misteris, se iniciaron el 1 de enero de 1909 y finalizaron el ocho de agosto del mismo año, siendo los albañiles encargados de la ejecución Bernat Oliver y Llorenç Lladó.

Los monumentos que se edificaron a lo largo del trazado ofrecen una bellas imágenes que representan los Misterios. Están diseñados en bronce y escenifican diversas escenas de la vida de Jesús y de María. Delante de cada uno de ellos hay un rellano que posibilita la contemplación de los misterios de gozo, dolor y gloria. La idea inicial de los arquitectos que los diseñaron era asignar a cada uno un color.

Formas arquitectónicas variadas

Arquitectónicamente, ninguno de los cinco monumentos tienen la misma forma. Están diseñados dentro de un estilo modernista y su realización fue manual, a golpe de martillo. En el año que se cumplía el 25 aniversario de la Coronación, ninguno de estos monumentos estaba finalizado. Fue en el año 1913 cuando se dieron por concluidos los trabajos.

Los medallones de los monumentos tienen diferentes formas. Así, los de gozo están cubiertos por un arco de medio punto como símbolo de pan y bienaventuranza; los de dolor aparecen enmarcados dentro de un recuadro y los de gloria, dentro de un circulo, símbolo de la eternidad.

La parte superior del montículo, cuya altura es de 527 metros, está presidida por una cruz hecha de hierro que fue sustituida en el año 1961 como consecuencia del deterioro de la primera, que era de madera y procedía de Tierra Santa. Tenía incrustaciones de madera de olivo del huerto de Getzemaní. La cruz actual fue una donación que realizaron Joan Crespí y Margalida Ferragut, según consta en los archivos del santuario.

Muchos escogen este rincón para rezar o contemplar, inmersos en el silencio, el impresionante paisaje que ofrecen las montañas del Massanella, el Puig Tomir, el Puig Roig y la Vall d´Albarca. En Semana Santa y durante las fiestas de la Diada, aquí se representa la Trobada de la Mare de Déu.