Este viernes, un grupo de ciudadanos argentinos de la localidad de Goyena visitó el municipio de Son Servera y tuvo la oportunidad de reencontrar o conocer a algunos de sus familiares décadas después. Ese fue el caso de Rafael Forteza, que por primera vez veía físicamente a su prima Francisca, con la que llevaba escribiéndose desde hacía ni más ni menos que cincuenta años. O Tomás Rubio, que después de dos desde que regresó a la isla quiso acompañar a sus conciudadanos de adopción en un momento tan emotivo. Todos ellos fueron recibidos por el alcalde, Josep Barrientos, quien se congratuló por su visita.