Hoy es el día grande de la feria del calzado de Lloseta, convertida en un gran expositor al aire libre para la venta de zapatos fabricados en la localidad.

Desde la apertura de los stands ayer por la mañana la gente empezó a comprar antes de que se agotaran los modelos más recientes, especialmente las mujeres, que quisieron hacerse con los mejores pares de diseño único.

También ayer hubo una misa en recuerdo de los zapateros del pueblo ya fallecidos y demostración de manufactura del calzado en la plaza, que fue muy visitada.