El túnel de sa Mola es ya una realidad después de que ayer el president del Govern, Jaume Matas, hiciera el corte oficial de la cinta con la que se abría al tráfico la variante de acceso al Port de Sóller que permitirá la peatonalización de la primera línea de la barriada. El de Sa Mola, además, pasa a ser el túnel más seguro de España al contar con todas las medidas de seguridad que exige la Unión Europea.

El alcalde de Sóller, Carlos Simarro, aseguró que la inauguración de ayer pasa a ser "el tercer hito histórico de Sóller tras la puesta en servicio del Ferrocarril y el túnel de Sóller" al ser "la solución perfecta para garantizar la peatonalización del Través con la que se transformará en una primera línea segura y moderna". Simarro aseveró que ayer fue "el primer día del nuevo futuro que se abre para Sóller".

Por su parte, Mabel Cabrer, consellera de Obras Públicas, aseguró mostrarse satisfecha al ser la "ultima de las once infraestructuras viarias que se han construido en Mallorca" al tiempo que aseguró que la variante cuenta con las más modernas medidas de seguridad que lo confieren como el más seguro de España. Cabrer destacó que en la ejecución de la obra trabajaron más de 300 operarios y que un presupuesto de más de 600.000 euros se ha destinado a medidas medioambientales para la integración de la nueva vía en el paisaje.

El último en hablar fue el president del Govern Jaume Matas quién aseguró que a través de este túnel podrán circular a diario más de 15.000 vehículos. Matas, que recordó que "hace cuatro años nos comprometimos a hacer realidad este proyecto" aseguró que el túnel de sa Mola "es el primero de toda España que se adapta a la normativa europea en seguridad de túneles". Matas comparó la entrada en servicio del túnel "a un sueño que se hace realidad" ya que "era una verdadera lástima ver el Port en la situación en la que estaba". Dijo que con las obras ejecutadas en el Port el municipio pasa a ser "uno de los mejores y más bonitos del Mediterráneo".

El president aseguró que con la puesta en servicio del túnel "se abre un nuevo ciclo en la isla donde las carreteras son más seguras y dejan de ser tercermundistas". Lo hizo justo después de calificar a la consellera Cabrer como "un crack" en su gabinete.

La obra

El Govern inició en julio de 2005 la construcción de la nueva variante de acceso al Port que tiene una longitud total de 2.149 metros de los 1.308 discurren por el interior del túnel, convirtiéndose en el segundo más largo de Balears. La actuación ha costado más de 21,5 millones. La calzada se divide en dos carriles de 3,5 metros, mediana central de un metro y arcenes de un metro. A ambos lados discurre una acera. Junto a la perforación del túnel el proyecto ha supuesto el soterramiento del tramo final del torrente de Sa Figera, la construcción de dos rotondas para la distribución del tráfico en la segunda línea del Port y en la creación de un paseo peatonal en la calle Antoni Montis. También se ha prolongado la calle Lepanto para dar acceso a la urbanización Es Través.

En el capítulo de seguridad, que ha supuesto un desembolso de 3,8 millones, se ha habilitado una galería de salvamento, sistema de ventilación, red contra incendios, instalaciones de control, circuito cerrado de televisión, repetidores de radiofrecuencias y sistema de detección de incendios. El túnel entró en servicio a partir de las 15 horas de la tarde. El cierre del paseo Es Través no se llevará a cabo hasta el martes, día en el que se prevé la finalización de algunos trabajos ayer todavía estaban pendientes de acabar.