La moda de las piscinas climatizadas está calando hondo en los municipios de Mallorca y la mayoría de localidades grandes de la Part Forana tiene o está en fase de construcción de una instalación de estas características. Lo que ocurre es que el alto coste de la gestión está obligando a un gran número de ayuntamientos a privatizar el servicio realizando una concesión a una empresa privada. Esta privatización se traduce en un aumento de tarifas que en algunos casos han provocado protestas.

En estos momentos los municipios que cuentan con piscina climatizada y tienen una gestión privada son Manacor, Inca, Alcúdia, Santa Margalida, Artà, sa Pobla y Muro. La de Manacor está gestionada desde hace varios años por la empresa Esquitxos, que fue concedida cuando el actual alcalde Antoni Pastor era edil de Deportes; las recién construidas de Alcúdia, Santa Margalida y Llucmajor las gestiona Gesport Balear, cuyo administrador es Rafel Nadal, edil de hacienda de Manacor, hermano del futbolista y tío del tenista. La concesionaria de las piscinas de Muro y sa Pobla es la empresa local Esports 85, mientras que la de Artà también es gestión privada a cargo de una empresa del pueblo que es Auiguasport S.A. En Inca la gestión también es privada a cargo de Club Sport Inca.

La gente demanda cada vez más poder nadar durante todo el año y un aspecto curioso es que en la pasada campaña electoral una promesa generalizada de los candidatos era la construcción de una piscina climatizada. Fue un auténtico reclamo de votos para los candidatos. Por ello nos encontramos que las localidades a partir de 8.000 habitantes tienen proyectada la piscina, a pesar del alto coste, más de un millón de euros cada una. Así las cosas nos encontramos que en Felanitx, Campos, Capdepera y Lloseta ya han iniciado las obras de sus respectivas piscinas climatizadas y todos estos municipios ya están mirando la posibilidad de dar una concesión. En la mayoría de los casos las concesiones son para 20 años.

Los dos únicos casos de gestión pública que encontramos en las piscinas municipales climatizadas son en Santanyí y en Calvià, dos municipios potentes con una elevado presupuesto debido a sus fuertes ingresos por su gran costa y sus núcleos turísticos.

Aumento de tarifas

El precio del servicio es muy similar, independientemente de la empresa que gestione la piscina. Está sobre una media de 30 euros al mes para los adultos. Lo que ocurre es que algunos ayuntamientos, como el caso de Llucmajor, iniciaron la gestión pública y se pagaba 13 euros. Este aumento de tarifas provocó protestas de la oposición que las calificaron de "abusivas" y lo mismo ocurrió en Santa Margalida.

Margalida Roig, edil de Hacienda de Llucmajor, explicó:"Nosotros decidimos privatizar la gestión debido al alto coste. Con las anteriores tarifas una persona podía nadar por 20 céntimos al día y con estos precios el servicio era muy deficitario". El coste de una piscina con gestión pública supera los 100.000 euros anuales, según los ayuntamientos consultados. Las empresas concesionarias reciben un canon del Ayuntamiento que ronda los 20.000 euros.