Como aspecto novedoso se incorpora una tasa para los supermecados. Ante el elevado número de carritos de compra abandonados en las vías urbanas, se aplicará una tarifa de 6 euros por la retirada de los mismos a las grandes superficies propietarias de los mismos. Entre las tasas que no varían figuran las que afectan al aparcamiento regulado y a los quioscos.