El primer teniente de alcalde del ayuntamiento de Calvià, Isidre Cañellas (UM), se mostró ayer prudente a la hora de valorar el nombramiento de Antoni Tirado, la ´mano derecha´ del tránsfuga Joan Thomàs, como cargo de confianza por parte del alcalde Carlos Delgado, y aseguró que "desconoce" los motivos por los cuales el primer edil ha ascendido a Tirado, aunque apuntó que "se puede imaginar" las causas, en referencia indirecta a una posible recompensa por parte de Delgado a Thomàs y Tirado por haber apoyado estos dos últimos la recepción de la urbanización Nova Santa Ponça.

Cañellas afirmó que "el PP de Calvià tiene en el Ayuntamiento un número de asesores y cargos de confianza y el partido puede nombrar a los que considere más adecuados". El líder local de UM añadió que "se trata de una decisión de Delgado que tiene que respetarse".

Tal como publicaba ayer este diario, Delgado nombró vía decreto el pasado 3 de octubre a Antoni Tirado como jefe de unidad adscrito a la dirección general de Servicios que gestiona Joaquín Legaza, uno de los hombres de confianza más próximos al alcalde. El decreto establece que el nombramiento de Tirado tiene carácter retroactivo, lo que permitirá a éste cobrar el sueldo de cargo de confianza desde el pasado 27 de septiembre, a pesar de haberse firmado el decreto el 3 de octubre.

La opinión del PSOE

Por su parte, el portavoz del PSOE, Antoni Manchado, afirmó que el nombramiento de Tirado "demuestra que el acuerdo entre PP y UM es una imposición que viene de Palma y el alcalde hará lo posible para ignorar esta imposición".

Manchado aseguró que la decisión de Delgado de nombrar a Tirado "no preocupa demasiado" al PSOE porque "quien tiene que pronunciarse es UM", un partido del que añadió que "también necesita argumentar que hay un pacto". A su entender, "es más grave que siga habiendo un tránsfuga en el pleno y todos miren a otro lado".