Los cazadores han construido una laguna para que beban las aves

Otra importante actuación de esta agrupación ha sido repoblar con encinas la parte montañosa de la Cala de Sant Vicenç que se vio afectada hace unos años por un incendio.

Según los responsables de la asociación, que preside Josep Lluís Pons, todas estas iniciativas han sido posibles gracias a las ayudas que reciben desde la conselleria de Medio Ambiente del Consell de Mallorca. Este año la subvención que les ha sido concedida asciende a ocho mil euros.

La Sociedad de Cazadores ha decidido invertir esta ayuda en la limpieza y restauración de caminos de montaña, en la recuperación de antiguas zonas de cultivo y en la formación y habilitación de nuevas zonas para la siembra de grano (mayoritariamente trigo) para la fauna silvestre local.

Para comprobar in situ el destino de dicha subvención, ayer el conseller insular de Medio Ambiente, Miquel Àngel Borràs (UM), visitó algunas zonas del término municipal de Pollença donde se han llevado a cabo las diferentes actuaciones.

Para Borràs, la subsistencia del medio ambiente "pasa por la gestión altruista y desinteresada de los cazadores. Se dedican a recuperar tierras abandonadas y a proteger la flora y la fauna del lugar". Por su parte, los responsables del colectivo cinegético consideran "muy compatibles" la caza con el medio natural, las prácticas agrícolas y el mundo rural, en general.

Jaulas de aclimatación

Otro de los proyectos relevantes es la construcción de jaulas de aclimatación. Gracias a ellas, las aves se van acostumbrando al clima y a la alimentación del lugar. Una vez logrado este objetivo, los cazadores sueltan estos animales para iniciar la repoblación.

Actualmente, la Sociedad de Cazadores de Pollença se dedica a repoblar perdices y faisanes porque consideran que las características medioambientales del término municipal son idóneas para estas dos especies.