Los amantes de la marina recuperaron ayer un símbolo de identidad. El llaüt Sant Isidre, construido en Portocolom en 1925, atracó después de tantos años en la zona portuaria. No sólo el barco autóctono navegó por las aguas de Portocolom, una vez restaurado en la Costa Brava. La Balear, construido en 1924 en Palma, regresó de nuevo al puerto, donde las autoridades esperaban su llegada para celebrar la tradicional procesión que honra a la patrona de los marineros, la Virgen del Carmen.

Este último llaüt desarrolló gran parte de su vida profesional en las aguas de Portocolom y ahora vuelve restaurado por el Consell de Mallorca. Estos dos emblemas, junto a otras 40 embarcaciones de madera, flotarán por las aguas de Portocolom con motivo de la Fira Marina Tradicional, que convertirá este fin de semana la zona en la capital de la náutica.

El encuentro festivo ha concentrado embarcaciones de madera tradicional y de interés patrimonial. Flotas de Mallorca, Menorca y Cataluña atracaron ayer en la zona portuaria para exhibirse delante de los numerosos visitantes interesados en la marina.

Esta primera muestra pretende recuperar la tradición de embarcaciones de construcción artesana y potenciar el trabajo de los maestros de aixa. Los espectadores encontrarán una exposición de siete barcos y así observarán de primera mano el trabajo de los maestros de aixa, los protagonistas de esta feria que también tiene un marcado carácter, cultural, lúdico y comercial.

El aficionado a la marina, además de apreciar las cualidades y las utilidades de los barcos de madera, podrá disfrutar de la muestra flotante de unas 40 embarcaciones participantes. En el espacio de tierra se reúnen elementos y productos relacionados con la marina tradicional, promocionados por un conjunto de entidades oficiales, privadas y de asociaciones ciudadanas dedicadas al uso, promoción y recuperación de la cultura marítima.

Talleres de remo y de vela latina, excursiones marítimas o regatas son algunas de las actividades lúdicas y deportivas que se celebran en esta primera muestra de marina tradicional, convirtiendo así Portocolom en la capital insular náutica durante este fin de semana.