Triple enfrentamiento el que ayer desató UM en el pleno ordinario del ayuntamiento de Sóller, en el que se aprobó la privatización del servicio de recogida de basuras, en tanto que este partido dio por rotas sus relaciones con su socio de Uniso, incumplió la disciplina de voto del equipo de gobierno y puso de relieve las diferencias entre los dos ediles de UM que costará un expediente disciplinario a Miquel Nadal. El alcalde Carlos Simarro (PP-IPIS) no descarta destituir al concejal díscolo Antoni Arbona de todas sus funciones en el equipo de gobierno a no ser que "sea coherente con los hechos protagonizados y dimita".
Los hechos se desataron cuando el pleno abordaba la privatización de la recogida de basuras. El concejal Antoni Arbona (UM) se sumó a la postura defendida por la oposición y votó en contra por considerar que la decisión era "precipitada" y por "no disponer de los informes jurídicos apropiados". No obstante, los que hasta ayer eran sus socios de coalición, Miquel Nadal (UM) y Bartolomé Pomar (Uniso), votaron a favor de la propuesta presentada por el PP-IPIS. Se dio la paradoja que tanto Arbona como Nadal intervinieron por separado en los turnos de replica hablando en nombre del mismo partido.
La tensión que se vivió en el pleno llegó a tal extremo que incluso Arbona llegó a pedir al alcalde "si todavía soy concejal del equipo de gobierno, teniente de alcalde, o si ya me han destituido". Las fricciones fueron calentando el ambiente hasta el final del pleno, cuando Arbona se enfrentó con su correligionario de partido, Miquel Nadal y su hasta entonces socio de coalición, Bartolomé Pomar, para recriminarles su postura adoptada a favor del equipo de gobierno y en contra de la tesis oficial de UM. Todo ello ante la perplejidad de algunos concejales que todavía quedaban en la sala de plenos.
Sin duda lo de ayer es el inicio de una crisis interna de UM de la que todavía es difícil vaticinar su desenlace. Por una parte el comité local abrió ayer tarde un expediente disciplinario contra Miquel Nadal por haber roto la disciplina de partido. Para el próximo miércoles se ha convocado una reunión del comité local que estudiará el caso. Nadal no descarta pasar al grupo mixto en función de lo que decida su partido.
La situación que se desencadenó en el pleno no parece que tenga repercusión en la mayoría de gobierno, puesto que Nadal y Pomar tienen el apoyo del PP. En caso de que Arbona se marche o sea destituido, los votos del PP-IPIS, Uniso y el de Nadal confieren aún la mayoría absoluta en la cámara local.
El ayuntamiento está gobernado por el pacto suscrito por las coaliciones UM-Uniso, que dispone de tres concejales, y la del PP-IPIS, con siete.
